3 mar 2020

Ay Saulo, Saulo, hazme el favor de callar

El amor no se sufre.

Se respira, se vive, se late. 
El amor cicatriza heridas pasadas. 
El amor da alas. 
El amor acompaña y es luz en las malas.
El amor no es truque. 

Es el único ámbito libre de rencor, por mi parte.
Hace cosa de 9-10 años odiaba hablar de "compensa". Pero eso es el amor, en parte. 
El amor no es rosa, ni todo felicidad,
PERO NO SE SUFRE. 
Sino que las diferentes opiniones pierden el poder de herir, porque no tienen tanto valor. 

Caso práctico, aunque no hablemos de amor. 
Con J. me ponía de morros por problemas que no eran reales. 
Pre-ocupaciones. 
Con otros sujetos, de nombres desagradables, ni siquiera me pronunciaba.
Miedo. 
A ti te cuento ilusiones, pesadillas, objetivos, celebro pequeños logros, 
Te pregunto opinión de mi ropa, y mi felicidad vale todo. 
Eres mi mejor amigo, esperemos que Tato no se pique. 

En estos años he aprendido que quien no se va es quien merece la pena. 
Quien te da libertad. 
Quien te recuerda tus sueños. 
Quien te permite llorar. 
Quien habla con miradas. 
Quien se adapta a tus tiempos. 
Quien te pasa toallitas. 
Quien te compra gominolas. 
Quien alguna vez te mece para dormir. 
Quien se sienta a tu lado ado cuando estás con suero. 
Quien dice que ríes cuando lloras fuerte. 

Reconozco que soy más fría que hace 10 años. 
Pero con amistad transformada en amor todo es más fácil. 

Cambios de peso, de domicilio... De ti no. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario