Me siento utilizada, me siento
insultada, me siento maltratada y me siento imbécil. ¿Por qué no aprendo de una
vez a calar a la gente con dos frases? ¿Por qué doy segundas y enésimas oportunidades?
¿Por qué hago más caso a Marx que a Maquiavelo?
La naturaleza de
los hombres soberbios y viles es mostrarse insolentes en la prosperidad y
abyectos y humildes en la adversidad.
Me parece otra
manera de decir: No te puedes fiar de nadie. Y yo ya debería saberlo, pero soy
tan imbécil, tan ilusa… que no tengo prejuicios, que pienso que cada persona es
buena por naturaleza.
Pero es todo
mentira. El ser humano es la criatura más cabrona de la creación. Solo hay que
ver las noticias o la vida misma.
¿Qué criatura
considera un arte matar por matar? ¿Qué criatura mata a su igual por
diferencias? ¿Qué criatura disfruta con la tortura física de otro?
Pues lo dicho. Ya estoy
harta de todo. Sí, habrá amigos verdaderos en los que poder confiar, pero la
vida ya me ha dado demasiadas muestras de que hay amistades sinceras y otras
que no lo son. Que las segundas oportunidades no valen de nada. Y fijo que me
volveré a equivocar, porque la vida es así, pero me equivocaré UNA vez.
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