Sobran sueños y fantasías.
Lo que no sobra es la realidad, nuestra realidad.
Una relación real que no agobia, no exige, no reprocha.
Ayuda, comprende, protege.
Y disfruta.
De cada palabra, cada silencio, cada mirada, cada risa, cada caricia.
No es sucesión de días o meses. Es un reloj de arena tumbado.
"Cuánto llevais?"
Para mí, toda la vida.
Desde antes de ser amigos, antes de todo.
Llevamos predestinados desde antes de nacer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario