29 abr 2016

Indignación

El día que fui por primera vez a mi intento de recuperar mis bailarinas y espejos el profesor me preguntó por mí dificultad, y lo vio complicado.

Por eso me molesta que en programas televisivos de danza se pasen por alto esguinces, por decir algo.
"Es que está lesionada, pero se notan sus ganas"

O sea, que yo me fui llorando de Hélade la noche que me desgarré el gemelo en ejercicio de barra, pero en un grupo con un nivel alucinante un error te hace intocable.

Sé que me lo llevo muy a lo personal, pero, por esa regla de tres....
Voy a parar.

Sabéis?
Yo amo la danza desde los 4 años.
Lo he tenido muy difícil, de hecho aún lo tengo.
Soy consciente de que mi cuerpo ya no me está capacitado para fundirme, pero hago todo tipo de locuras para intentar vislumbrar a una bailarina en los espejos de mi casa.

Que te digan que no vales para ello no significa nada malo.
De sueños se vive.
Y hoy he leído que quien una vez bailó puede bailar mentalmente.
Nadie sabe cuántas veces he soñado con hacer piruetas de contemporáneo, atlético.

No hay comentarios:

Publicar un comentario