27 nov 2017

Prohibido pensar

La otra vez fue en marzo, ya no sé si del año pasado o el anterior.
Qué poco gusta medir la distancia de malos días.

4horas respirando lo justo y la cabeza a punto de estallar.
120pulsaciones? Pocas me parecen.

La persiana está demasiado bajada.
La sábana está fría.
Mi cabeza no sabe estar.

Mañana gimnasio, sí sí. Espera que me apetece desplomarme en el camino de ida.

Desayunar? Qué es eso? Ayer no hizo falta cenar para que se te revolviera todo.
Hoy tampoco.

Ah, y vete olvidando de dar vueltas en la cama, que tirnes oxígeno justito.

Algo así ha sido esta "noche".

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