15 mar 2016

Ensueño

Lo siento por aquéllos que no tienen suerte en el amor, aquéllos que viven frustrados y aquéllos que siempre han tenido todo.

La libertad de expresión me permite escribir lo que siento, gritar mis sueños y, por supuesto, sentir lo que siento.

Sé que soy rara, difícil de entender y que muchas personas creen exageradas mis particularidades.
Pues es lo que hay.
Ojalá pudiera cambiarlas.

Llevo mejor la ansiedad, pero me gustaría dejar de llevarla.
Y me encantaría ser capaz de muchas cosas.
Y estar más en las tallas estándar, físicas y psicológicas.

Una dieta para no subir de peso, como la mayoría.
Aprender a pasar de muchas críticas.
Y, por supuesto, no dejar que me afecten movidas externas a mí.

Aceptar de una santa vez mi realidad.
Contigo.
Con tiempo.
Con vacíos.

No creo que pueda resumirlo en simple envidia o necesidad de encajar.

Me siento dividida entre sueños conseguidos y formas de vida que me han sido prohibidas.

Para que luego digan que de sueños no se vive.

No hay comentarios:

Publicar un comentario