En compañía o en soledad. Corazones de
chocolate, rosas de gominola, una carta de amor. Parejas que se sonríen, se
acurrucan en cualquier lugar. Un día en el que no importa el frío, acompañado
por champán; un café cuenta mucho más que cualquier otro día. Pero no solo es
un día para parejas encontradas, sino también un grito de esperanza para los corazones
solitarios. Eso de que “el amor está en el aire” cobra sentido. Esta misma
mañana, comenzando mi rutina, me han embargado recuerdos del amor. Miradas,
palabras, fechas, olores, sensaciones, pálpitos… y una palabra: ESPERANZA. He
estado enamorada una vez. Me han tratado bien una vez. Pero AUN no he vivido un
San Valentín acompañada. Dado que es un día para amar, solo puedo recrearme en
ese amor corto pero intenso. El amor es
una cosa simple, pero también el
regalo más grande.
Feliz San Valentín
No hay comentarios:
Publicar un comentario