La música en la calle es como el sexo de una noche. Y yo
quiero una novia.
Esta frase la dijo un concursante de un cazatalentos, y a mí
me pareció la frase más bonita relacionada con la música que he oído en mi
vida. Tanto, que aun no siendo compartida, fue mi estado durante varios días. Por
mucho que Platón la ensalce como “gimnasia”, por mucho que Pablo Alborán
parezca decir que roza por dentro, esta frase la define como un deseo, una
necesidad, una ley de vida. Aunque no lo comparta, mi empatía de permite
comprenderlo. La vida es amor, tarde o temprano. Sin amor, no tiene sentido. De
hecho busco amor en cada minuto del día. Y, por supuesto, no me dejo embriagar
por la posibilidad de tener sexo de una noche. Ahora cambia “amor” por “música”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario