16 may 2013

Amigo :)


He aprendido a ser feliz sin la puta necesidad de tener medio corazón cancelado. Siento mis malos modales pero es lo que siento. Tú me has abierto esa oportunidad a ser totalmente sincera y no tener miedo de si voy a caer mal. Soy así, un saco de contradicciones. Yonki del amor pero con mucho miedo a recaer. Apasionada al deporte que no controla el límite del alcohol. Pero, ¿sabes? No me importa, ya no tengo el miedo de antes. Sí, el alcohol me hace muy vulnerable porque hace que mi armadura desaparezca. Pero no he de temer porque siempre hay alguien conmigo. En la última ocasión, tú. Sí, tú. Caramelo, parte de océano, dos sobres de tila y el que dormía mientras los demás comíamos. Sigo teniendo muy en mente que quiero actualizar mi lista de abrazos, sigo pensando que tú puedes ser un gran abrazador, sigo, sigo, sigo…

¿Hay algo más inocente que soñar, desear, recordar? Tampoco tengo nada TAN especial como para recordar continuamente. Hace un par de años me estremecía al oler cierta colonia masculina, igual que al ver su chaqueta. Y sé que una prenda tuya es blanca con sutiles cuadros negros, pero no hay nada más; simplemente sé que es tuya. Tranquilo, esa chica que sufría ansiedad, que se quejaba mucho, que dejó el plato de arroz a la mitad y que se ilusionaba demasiado rápido ha cambiado. Le alegra ver que no hay prisa en nada, que no habrá anticipos exagerados. Perfecto para evitar dolor innecesario y rencor, que es lo que más me podría preocupar.

En definitiva, no quiero ser repetitiva, pero GRACIAS. Como buen amigo me has hecho sonreír en una época gris; no lo voy a olvidar, Caramelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario