Puede ser cuestión de hormonas o que, como tantos piensan, esté loca.
Mi cuerpo y mentalidad nunca encajan con lo que supuestamente toca.
Disfruto pintando mandarlas y colocando horquillas, pero también siento calambres con bebés, con firmas de papeles.
Una discusión que no va conmigo, pero que me puede tocar tragar, decide cómo y cuándo mi cuerpo avanza.
Por qué se juntan los cambios.
Sonrisas del revés, ya derechas.
Otros géneros literarios.
No hablo de estaciones, ni años, aunque también.
Yo voy a lo simple.
La soledad y la compañía.
El colacao y el café.
Las barbies y los tacones.
No tenerte.
Agradecerte.
Vivirte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario